viernes, 10 de diciembre de 2010

LÉOLO

Porque sueño no lo estoy.

Porque sueño, sueño.

Porque me abandono por las noches a mis sueños antes de que me deje el día.

Porque no amo. Porque me asusta amar.

Ya no sueño. Ya no sueño.

A ti la dama, la audaz melancolía, que con grito solitario hiendes mis carnes ofreciéndolas al tedio. Tú que atormentas mis noches cuando no sé qué camino de mi vida tomar… te he pagado cien veces mi deuda. De las brasas del ensueño sólo me quedan las cenizas de la mentira, que tú misma, me habías obligado a oír. Y la blanca plenitud, no era como el viejo interludio y sí una morena de finos tobillos que me clavó la pena de un pecho punzante en el que creí, y que no me dejó más que el remordimiento de haber visto nacer la luz sobre mi soledad.

Léolo (1992)
Esta es una de mis citas favoritas de esta película que ví hace varios años pero que nunca llegué a olvidar y tenía ganas de compartirla.
AIDA

miércoles, 8 de diciembre de 2010

99 ejercicios de estilo

99, que tiene el número, parece suficiente ¿no?, creo que es realmente difícil llegar a él en un solo tema, pero realmente se ha llegado. Yo no sé sí llegaría al 99. Pero si damos la vuelta al número sale 66, a mí me gusta el 6, asique creo que 99 es un buen número.

Con esta pequeña introducción quiero hablar sobre los 99 ejercicios de estilo. Pero ¿Qué es 99 ejercicios de estilo? Es trabajar un asunto trivial desde múltiples perspectivas, de forma que cada una de ellas parta de un preámbulo distinto. Pero veámoslo desde la perspectiva de nuestro autor.



RAYMOND QUENEAU.

Notaciones

En el S, a una hora de tráfico. Un tipo de unos veinteiseis años, sombrero de fieltro con cordón en lugar de cinta, cuello muy largo como si le hubiesen estirado. La gente bjaba. El tipo en cuestión se enfada con un vecino. Le reprocha que lo empuje cada vez que pasa alguien. Yono llorón que se las da de duro. Al ver sitio libre, se precipita sobre él.

Dos horas más tarde, lo encuentro en la plaza de Roma, delante de la estación de Saint-Lazare. Está con un compañero que le dice: <<Deberías hacerte poner un botón más en el abrigo.>> Le indica dónde (en el escote) y porqué.

Retrógrado

Te deberías añadir un botón en el abrigo, le dice su amigo. Me lo encontré en medio de la plaza de Roma, después de haberlo dejado cuando se precipitaba con avidez sobre un asiento. Acaba de protestar por el empujón de otro viajero que, según él, le atropellaba cada vez que bajaba a alguien. Este desacuerdo joven era portador de un sombrero ridículo. Eso ocurrió en la plataforma de un S completo aquel mediodía.

Punto de vista subjetivo

No estaba contento con mi vestimenta, precisamente hoy. Estrenaba sombrero nuevo, y un abrigo que me parecía pero que muy bien. Me encuentro a X delante de la estación de Saint-Lazare, el cual intenta aguarme la fiesta tratando de demostrarme que el abrigo es muy escotado y que debería añadirle un botón más. Aunque, menos mal que no se ha atrevido a meterse con mi gorro.

Poco antes, había reñido de lo lindo con una especie de patán que me empujaba adrede como un bruto cada vez que pasaba, al bajar o al subir. Eso ocurría en uno de esos inmundos autobuses que se llenan de populacho precisamente a las horas que debo dignarme a utilizarlos.

Palabras compuestas

Yo me platautobusformaba comultitudinariamente en un espaciotiempo luteciomeridiano vecinando con un longuícolo mocoso fieltrosombrereado y cordonotrenzón. El cual altavoceo aun tipofulano: <<Usted me empujaparece.>> Tras eyacular estó, se sitiolibró vorazente. En una espaciotemporalidad posterior, volví a verlo mientras sanlazaroestacionaba con un X que le decía: <<Deberías botonsuplenmentearte el abrigo.>> Y le porque explicaba el asunto.

Análisis lógico

Autobús.

Plataforma.

Plataforma de autobús. El lugar.

Mediodía

Aproximadamente

Aproximadamente a mediodía. El tiempo.

Viajeros.

Pelea.

Pelea de viajeros. La acción

Joven.

Sombrero. Largo cuello delgado.

Un joven con un sombrero y un cordón trenzado alrededor. El personaje principal.

Quídam.

Un Quídam. El personaje secundario.

Yo.

Yo.

Yo. La tercera persona. Narrador

Palabras.

Palabras.

Palabras. Lo que se dijo.

Sitio libre.

Sitio ocupado.

Un sitio libre ocupado después. El resultado.

La estación de Saint-Lazare.

Una hora más tarde.

Un amigo.

Un botón.

Otra frase oída. La conclusión.

Conclusión lógica.

Pero esto no es el final, porque hay otro autor que se inspiró en Raymod Queneau para hacer sus propios ejercicios de estilo. Matt Madden dibujó un libro con 99 comic sobre el mismo tema pero desde 99 puntos de vista. La historia trata de un hombre está trabajando y baja a la cocina a por algo de comer, por el camino su mujer le pregunta la hora, y cuando llega a la nevera no se acuerda de lo que quería. Mejor no os lo explico, os lo enseño.

El dibjujo original



En una sola viñeta



Como un mapa



El boceto



El siguiente paso es hacerlo nosotros, tenemos que realizar 10 relatos diferentes sobre el mismo tema, ya sea dibujo, fotografía, video, escrito… vamos, que en el fondo, de lo que queramos. ¿seremos capaces?

AIDA

Objetos imposibles

¡Hay en el mundo tanta locura!

¿Tanta? No sé yo, tal vez sean menos de los que esperamos.

Todos en el fondo inventamos cosas, en nuestra vida cotidiana inventamos diálogos para poder conversar con las demás personas, inventamos nuestra propia rutina, que repetimos cada día. Pero a veces, solo a veces esto cambia y ahí es donde entra la creatividad, la capacidad de salirse de lo normal, de lo que siempre hacemos y del aburrimiento que ello produce, aunque nos sintámonos cómodos con la rutina a veces necesitamos algo que nos saque de ella.

Inventar cosas imposibles, la gente inventa cosas imposibles, pero. ¿Para qué inventarlas, si son imposibles?, Pues precisamente para eso, para salir de aquello que es siempre igual, yo, por mi parte, he hecho mi cupo y he inventado mi objeto imposible, y ¿qué es? Pues una sartén, pero no una sartén corriente, si no una sartén de plástico, y ¿para qué sirve?, pues para nada, de eso se trata, un objeto inservible pero inventado, ¡por mi!

Lo que pasa es que por pocos medios que tenía en la semana que se nos mandó pues es un boceto.

Aquí lo tenéis, no lo parece mucho, pero como ya os he dicho que es, os lo imagináis ¿no?, yo espero que sí

Cuando empezamos...

Sí, ya hemos empezado el curso.

Sí, empiezo tarde.

Había pensado empezar este blog con otra cosa, pero no se me permite retrasarme más, asique empezare por lo último.

Empezaré por la ultíma clase que tuvimos, sí, por aquel viernes 22 de octubre del 2010. Por aquella época ya tuvimos que llevar a clase un objeto que sintiéramos original y propio. Yo llevé un marco de fotos que hice cuando era pequeña en una de las veces que fuí a una granja escuela de estas que siempre nos llevan. Marco que mi madre guarda con gran cariño.



La foto es de hace dos años, pero era la única que tenía a mano.

Pero no quería yo empezar por esto, si no por lo último, es decir, por los BLOQUEOS DE CREATIVIDAD.

Que son cinco.

Bloqueos perceptuales: no te dejan ver con claridad cual es el problema.

Bloqueos afectivos: son las inseguridades internas, el temor a lo desconocido, miedo al ridículo. Como la vergúenza o la baja autoestima.

Bloqueos cognitivos: no te deja usar la imaginación.

Bloqueos conativos: lo produce la falta de curiosidad, la desmotivación, falta de deseo, actitud, falta de voluntad... Como la rutina.

Bloqueos socioculturales: imposición de normas, patrones sociales, referencias sociales y culturales. Como la edad, género.

A la hora de definir la creatividad, hay varios factores que hay que tener en cuenta:

-Fluidez: es el mayor número de respuestas que se pueden dar a una cuestión determinada.

-Flexibilidad: muchos objetos de una sola categoría.

-Elaboración: que las cosas estén bien hechas.

-Coherencia interna: que tenga sentido.

Esto es todo por hoy, ya seguiré investigando como funciona esto e iré subiendo cosillas varias.